* Realizaron necropsia a ejemplares muertos por
causas aún desconocidas
* Encontraron que tenían el sistema nervioso
colapsado
Alondra García Lucatero
Marco Reyes Torres, biólogo de El Refugio de Potosí. |
El funcionario señaló que se han recogido cerca de 50
ejemplares moribundos de pájaros bobo desde hace tres días en las playas antes
mencionadas, algunos de los cuales fallecieron mientras se les brindaba
atención.
Explicó que le realizaron la necropsia a los ejemplares que
se recogieron muertos en las playas y a los que murieron mientras se les
atendía.
El estudio arrojó como resultado que las aves tenían el
tracto digestivo vacío y el sistema nervioso colapsado; se enviaron muestras a
la UNAM y la Profepa ya está a la espera de los resultados.
“Llegan como cansados, como si estuvieran aletargados, con
inflamación y lagrimación en los ojos, hasta ahorita han muerto siete”, apuntó.
Tan sólo el domingo pasado recibieron en el Refugio de
Potosí ocho pájaros bobo que algunos turistas recogieron de Playa Blanca cuando
los encontraron moribundos.
Subrayó que la única especie afectada por este fenómeno de
mortandad ha sido el pájaro bobo café, una especie residente de este municipio.
Un pájaro bobo recuperado camina junto a otra ave que no logró sanar y murió. |
Al cuestionarle sobre las posibles causas de la mortandad de
aves, el biólogo señaló que podría tratarse de alguna enfermedad, aunque no
tiene sospecha de enfermedades comunes en esta especie.
“Hay bobos muertos en la playa, de seguir los índices vamos
a tener que hacer caminatas desde barra de potosí para ir contabilizando
cuantos ejemplares hay, ahorita sólo tenemos los que nos han traído los
turistas”, mencionó el ambientalista.
Respecto a las características de las aves afectadas, explicó
que se trata de pájaros bobo adultos; no se ha presentado ningún caso de aves
jóvenes enfermas.
Sobre la posibilidad de que se trate de una enfermedad
viral, el biólogo Marcos Reyes Torres explicó que esto pondría en riesgo a toda
la población de pájaros bobo debido a la facilidad que los virus tienen de
transmitirse.
“Hasta ahorita desconocemos si es algo viral, con una población tan grande de bobos sería complicado aplicar medidas preventivas para evitar más contagios”, expuso el ambientalista de El Refugio de Potosí.
El ambientalista y biólogo de El Refugio de Potosí sostiene un pájaro bobo que murió unos minutos antes de que se tomara la fotografía; el ave presentaba inflamación ocular, lagrimeo y debilidad. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario