jueves, 6 de diciembre de 2012

Influyentismo y prepotencia, los peores enemigos de los programas viales

* Los funcionarios, sus amigos y parientes son los más problemáticos

Enrique GUEVARA AYVAR

ZIHUATANEJO, GRO. El influyentismo y la prepotencia de algunos funcionarios, sus amigos y parientes han sido los peores enemigos de los programas viales implementados hace poco más de dos meses por la coordinación de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad (CSPTV).

El coordinador general, Pedro Salinas Solache, recordó que desde hace dos meses se vienen aplicando los programas de uso obligatorio del cinturón de seguridad, Uno a Uno para el paso de vehículos en la zona centro de la ciudad y la prohibición del uso del teléfono celular al conductor mientras circula.

Sin embargo, lamentó que los agentes de tránsito han tenido que lidiar con el influyentismo y la prepotencia, principalmente de algunos funcionarios, sus parientes y amigos, quienes se niegan a acatar los reglamentos viales.

En cuanto a la puesta en marcha de cinco semáforos instalados a lo largo del recién modernizado boulevard Zihuatanejo, el entrevistado aseguro estos están perfectamente sincronizados y operando al cien por ciento, aunque falta por poner en orden algunos cruceros cuyas laterales aun no están terminadas.

Presumió que la Coordinación de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad cuenta con cámaras estratégicamente ubicadas que les permiten darse cuenta de cómo funcionarios, maestros y padres de familia violan el reglamento vial con frecuencia.

Aunque también presumió que la Coordinación de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad cuenta con cámaras estratégicamente ubicadas que les permiten darse cuenta de cómo funcionarios, maestros y padres de familia violan el reglamento vial con frecuencia.

“Estacionan sus automóviles frente a sus planteles educativos hasta en triple fila sin importar si afectan a terceros que llevan su tiempo medido para llegar a sus centros de trabajo”, apuntó.

El funcionario remarcó que es imposible contar con un agente de Tránsito para cuidar la actitud prepotente de cada conductor que viola el reglamento.

Apuntó que este es un problema de conciencia y no de actitud, ya que con frecuencia cuando un agente de tránsito pretender levantar una infracción el conductor responde que no la pagará porque tiene un amigos, pariente o jefe que es muy influyente.

“Y eso pasa a diario”, concluyó Salinas Solache. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario